Una Historia de Terror para mi Padre
Hola papá, feliz cumpleaños, perdona la tardanza tenia trabajo pendiente en la oficina, pero sabes que jamás me perdería este día tan especial, espero que estés feliz de verme. Se lo dije como mera cortesía, en fondo ambos sabíamos que ninguno de los dos estábamos felices de vernos; y debo decir que las razones de cada uno eran buenas, pero las mías más. Pobre de mi viejo, le costó demasiado caro ser un violento sin causa. Aunque bueno, pienso que recibió su merecido. Cosas como no poder caminar y eventualmente por alguna razón perder la voz no me parecía tan malo, pudo haber sido peor... La enfermera nos dejó solos en la habitación, mi viejo eludía mi mirada como si a dichas alturas de nuestras vidas se arrepintiera de lo que había hecho. Espere pacientemente por un par de minutos, pero al ver que él no planeaba decir nada se me ocurrió la idea de contarle una historia. Yo jamás había escuchado una historia de el para mí, así que porque no dar yo el primer paso. “Puedo conta...